Si hay algo que caracteriza a la música de estos chicos extraños es el indie rock al más puro estilo garage. El grupo de Ryan Sambol, cuya voz puede recordar a la rasgada voz de Bob Dylan, apuestan en sus dos trabajos, "Be brave"(2010) y "The strange boys and girls club" (2009) por los chirriantes solos de guitarra junto con el sonido "sucio" del garage, acompañado en algunas ocasiones con el sonido del saxo, el cual aporta ese toque blues de raíces sureñas. Be brave, tema que se ha convertido en el lema de la banda, es un buen ejemplo.
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